TARJA
The Shadow Self
earMUSIC
La propia Tarja Turunen siempre ha reconocido que su relación con el metal en cierto modo ha sido circunstancial puesto que pasó de prácticamente no escuchar este estilo de música a convertirse en la vocalista de Nightwish, una de las bandas punteras de la emergente escena metálica de finales de los años noventa.
Durante una década gestó junto a sus ex compañeros de Nightwish un particular modo de entender el power metal lustrado con unas voces operísticas que rápidamente llamaron la atención en Europa para en poco tiempo alcanzar el reconocimiento a escala mundial.
En 2005 su marcha de Nightwish supuso toda una convulsión en la escena europea, además de un serio riesgo para su carrera. La historia de la música está llena de grandes vocalistas que se veían capaces de emanciparse e incluso superar a las bandas con las que consiguieron el estrellato. Sin embargo, en muchos casos sus nuevas carreras en solitario acabaron estrelladas.
Tarja ha seguido una trayectoria discontinua, pero al menos ha sabido mantenerse a flote editando discos de calidad y consiguiendo que su nombre no caiga en el olvido. En 2016 ha realizado una apuesta importante por alcanzar un escalón más alto y reivindicar su posición en el escalafón heavy.
The Shadow Self viene presentado por su compañía como un disco de heavy metal, aunque en realidad es una variada colección de canciones de rock con trazos pop y en la que no faltan guitarras potentes, pasajes orquestales y guiños al metal.
El disco se abre con todo un himno del que podrían haber presumido la mayoría de bandas de metal con cantante femenina al frente. Innocence es la mejor presentación posible de esta obra. Sorprende un interludio de piano a todas luces excesivo en mitad de la canción pero destaca sobremanera un estribillo pegadizo y épico.
El filo más metálico de The Shadow Self llega con Demons In You, un tema en el que destaca el dueto que Tarja se marca con Alissa White-Gluz, la vocalista de Arch Enemy, quien también llama la atención por la variedad de sus registros. Todo un yin y yang de potencia y melodía en otro de los mejores momentos de este trabajo.
Más suave y a modo de single emerge la accesible No Bitter End mientras Love To Hate se pierde en pasajes más intrincados, bañados por orquestaciones. Sorprendente cuanto menos es la versión del Supremacy de Muse en la que Tarja alcanza tonos imposibles. Rebaja notablemente la tensión en la melódica The Living End para reengancharse con otra meritoria canción de tensiones contrastadas: Diva.
Toni Turunen, hermano de Tarja, colabora en Eagle Eye, una canción muy representativa del sonido de The Shadow Self. En la balanza de temas suaves se aloja Undertaker y en la operística Calling From The Wild. Cierran con Too Many, otro medio tiempo melódico que completa un trabajo que supera la hora con creces.
Los seguidores de Tarja no se decepcionarán con estas once canciones de estilos variados y en las que la vocalista finesa despliega un amplio registro de voces, lo mismo transita por las zonas más pop que asciende hasta los territorios operísticos por los que ha alcanzado su fama internacional.
