Rock Fest Barcelona 2019 no ha sido una edición especialmente volcada en el thrash metal, pero sí ha tenido algunas excepciones que para nada han pasado desapercibidas. Si el sábado había sido el turno de los manchegos Angelus Apatrida, el domingo llegó el de Testament, uno de los grandes exponentes del género surgidos en la prolija escena thrash de California.
Los americanos llegaron a Barcelona con la tranquilidad de haber grabado las canciones del que será su próximo disco de estudio, que prevén editar a comienzos del año que viene. Este mes de julio trabajarán en las mezclas junto con el productor Andy Sneap, actual guitarrista de directo de Judas Priest.
Lo de Testament en Barcelona, tal como se preveía, fue toda una tormenta de metal capitaneada por el coloso Chuck Billy, capaz de edulcorar su fiero aspecto con una sonrisa contagiosa. El mérito de la banda californiana radica en la importancia de sus individualidades y en la buena cohesión que manifiestan entre ellos.
Guitarras demoledoras de Alex Skolnick y Eric Peterson, una sección rítmica de altura con Steve Di Giorgio (bajo) y Gene Hoglan (batería) y una voz personal y rotunda a cargo de Chuck Billy. En Can Zam mantuvieron su confianza en el que todavía sigue siendo su último disco; Brotherhood Of The Snake, con el tema título y The Pale King de entrada.
A partir de ahí la descarga no tuvo un segundo de descanso diseminando canciones de buena parte de su discografía; More Than Meets The Eye, Low, Into The Pit… Billy hacía que tocaba la guitarra utilizando su particular pie de micro e intentaba atribuirse el mérito con sorna mientras Alex Skolnick ejecutaba los solos.
Practice What You Preach fue uno de los clásicos mejor recibidos mientras que con Over The Wall consiguieron que se generara un circle pit entre el público. La parte final del concierto estuvo dominada por temas como Disciples Of The Watch y The Formation Of Damnation. Testament dejó muy bien representado el thrash metal con una descarga de una hora al máximo de revoluciones.
