Tal como publicó METAL JOURNAL horas después de su actuación en Zamora, Accept pertenece a una estirpe irrepetible en peligro de extinción. Bandas legendarias de heavy metal que jamás podrán ser sustituidas. Otros han venido y otros vendrán, cosecharán sus éxitos y conseguirán que la rueda siga girando, pero nunca habrá otros Judas Priest, otros Iron Maiden, otros Black Sabbath, otros Manowar, otros Motörhead, otro Dio, otro Ozzy Osbourne… y un largo etcétera en el que, por supuesto, están Accept y Dirkschneider, las dos bandas surgidas de la misma matriz.
Accept llegaron a Zamora con viento de cola y con la confianza necesaria para marcar la diferencia. Y lo hicieron todavía en la gira de presentación de Humanoid, su último disco de estudio publicado el año pasado. Próximamente realizarán un tour muy especial de 50 aniversario, que estará acompañada por la edición de un disco de grandes éxitos regrabados con la voz de Mark Tornillo.
Defendiendo su última obra en Zamora abrieron con The Reckoning y Humanoid antes de enarbolar los primeros clásicos; Restless And Wild y London Leatherboys. Como un gran capitán que controla todo lo que acontece en escena, Wolf Hoffmann lideraba las hostilidades de la banda alemana con la confianza de quien se sabe con los galones necesarios para acometer su tarea.
A diferencia de su paso por Rock Imperium Festival 2024, donde contaron con el guitarrista Joel Hoekstra (Whitesnake…), en esta ocasión han recuperado a Philip Shouse como contrapunto a Wolf Hoffmann. En Zamora también se pudo ver otra diferencia con respecto a giras anteriores. El también guitarrista Uwe Lulis (ex Grave Digger, Rebellion…) ha ganado muchos enteros en cuanto a protagonismo se refiere. Anteriormente ocupaba una clara segunda línea en el escenario y en Z! Live 2025 se le pudo ver al frente en muchas más ocasiones acompañando a Wolf y Philip.
El tono rockero de Straight Up Jack fue un contrapunto antes de adentrarse en la esencia clásica de Accept con un medley que incluyó Demon’s Night, Starlight, Losers And Winners y Flash Rockin’ Man. El álbum que significó la nueva etapa de Accept comandada por Mark Tornillo, Blood Of The Nations (2010), lo siguen equiparando a las obras maestras de los ochenta. En Zamora interpretaron hasta tres temas de aquel trabajo. El primero fue The Abyss.
Pocos cantantes hay como Mark Tornillo que se sumen a una banda legendaria y sean capaces de mantener la esencia y aportar su personalidad al mismo tiempo. En Zamora tal vez se le notó con una vuelta de tuerca menos de potencia, pero con la misma decisión al comandar a todo un tótem del heavy metal. En su chaleco lucía un parche de TT Quick, su banda de toda la vida. Apenas unos días antes de la actuación en Zamora había cumplido 71 años.
Compaginaron clásicos de un siglo y de otro sin ninguna merma de calidad; Breaker, Shadow Soldiers, Princess Of The Dawn… siempre bien guiados por la sección rítmica del batería Christopher Williams y del bajista Martin Motnik. Z! Live latió al ritmo de heavy metal en Metal Heart en una parte del show intensa a más no poder que coronaron con la sensacional Teutonic Terror y una poderosa Pandemic.
Al igual que había ocurrido al principio del show, se escucharon cánticos de “Heidi, heido, heida” en clara alusión a la canción popular alemana Ein Heller Und Ein Batzen que introduce a Fast As Shark. Y con esta piedra angular de Accept abrieron unos bises que completaron con Balls To The Wall y una festiva I’m A Rebel. Cada canción, cada movimiento, esas coreografías que recordaban a los Judas Priest más clásicos… Todo lo que destiló Accept en Zamora fue esencia pura del heavy metal, demostrando que sigue siendo imbatible en 2025 más allá de modas, géneros y subgéneros. Con ellos hasta el final.
ACCEPT – Repertorio
The Reckoning
Humanoid
Restless And Wild
London Leatherboys
Straight Up Jack
Demon’s Night – Starlight – Losers And Winners – Flash Rockin’ Man
The Abyss
Breaker
Shadow Soldiers
Princess Of The Dawn
Metal Heart
Teutonic Terror
Pandemic
Fast As A Shark
Balls To The Wall
I’m A Rebel
