Airbourne, estallidos de rock ‘n’ roll

AIRBOURNE
SUPERSUCKERS
Sala Santana 27, Bilbao
22 de octubre de 2019

Su fórmula puede ser conocida, pero sigue siendo exitosa a más no poder. Cerveza, sudor, energía a raudales y un pacto de sangre con el rock ‘n’ roll. Los australianos Airbourne arrancaron anoche su gira española y lo hicieron a lo grande ante una sala Santana 27 de Bilbao que lucía un ambiente espectacular. Todo un contraste festivo para un lluvioso y frío martes otoñal.

La banda comandada por los hermanos O’Keeffe está a punto de editar su quinto disco de estudio, Boneshaker, que saldrá este viernes coincidiendo con el concierto ‘sold out’ que ofrecerán en Madrid. En esta gira también harán escalas en Málaga y Barcelona.

Airbourne no llegaban solos a su nueva cita con Bilbao, una ciudad que conocen desde hace más de una década y en la que llegaron a actuar en el festival Kobetasonik en 2008. Con ellos están girando unos veteranos Supersuckers, que también mantienen una alianza con el rock ‘n’ roll. Ambas bandas defienden una misma bandera, aunque pertenezcan a generaciones y continentes diferentes.

Supersuckers

Supersuckers, la banda de Eddie Spaghetti, a diferencia de Airbourne cuyo nicho de fans tiende hacia el hard rock y el heavy metal, transita en territorios más cercanos al punk rock e incluso no desdeña el country. Se autodenominan ‘la banda de rock ‘n’ roll más grande del mundo’ y están curtidos en más de mil batallas dentro del underground, donde se han mostrado beligerantes desde finales de los años ochenta.

Sin ningún tipo de concesiones, los americanos saltaron al escenario de Santana 27 para ametrallar sus temas sin parones. All Of The Time, The History Of Rock ‘n’ Roll, Dead Inside, Breakin’ My Balls… Tanto en rasgos musicales como en la estética del propio Eddie Spaghetti, el recuerdo de Motörhead también está presente en la música de Supersuckers.

El guitarrista ‘Metal’ Marty Chandler fue el más impulsivo del trío estadounidense, asomándose constantemente al filo del escenario para encarar a los fans. The Evil Powers Of Rock And Roll, Rock-n-Roll Records (Ain’t Selling This Year) y Get The Hell percutían entre una audiencia que mayoritariamente se mostraba expectante.

Fue con la versión de Dead, Jail Or Rock ‘N’ Roll de Michael Monroe cantada por ‘Metal’ Marty Chandler cuando los espectadores de las primeras filas comenzaron a animarse. Ya en la recta final destacó la pegadiza Pretty Fucked Up y una extendida Born With A Tail, que cerró una actuación de 45 minutos. Sin duda una buena oportunidad de ver a una banda clásica que se mantiene fiel a su ideario musical.

Airbourne

Apenas un par de meses después de su actuación en el festival Leyendas Del Rock, Airbourne llegaban hasta Bilbao tan solo unos días antes de alumbrar Boneshaker, su quinto disco de estudio. Un álbum que han grabado en Nashville (Tennessee, Estados Unidos) con el reputado productor Dave Cobb.

La irrupción de los australianos en el escenario de Santana 27 fue todo un estallido de una energía contagiosa que se transmitió a una audiencia que, al mismo tiempo, retroalimentaba a la banda. Todo un circuito de corriente alterna que duró una hora y veinticinco minutos y que a muchos recargó las pilas para una buena temporada.

Al mando de todos los embates se sitúa un polifacético Joel O’Keeffe, capaz de cantar, tocar la guitarra solista y agitarse como un poseso. Sabe que está bien respaldado por todo un arsenal rítmico que comanda el batería Ryan O’Keeffe y que completan el bajista Justin Street y el guitarrista Matt ‘Harri’ Harrison. Este último actuaba por primera vez en Bilbao ya que apenas lleva dos años siendo miembro de la banda.

El comienzo fue toda una descarga sin tregua en la que enlazaron Raise The Flag, Too Much, Too Young, Too Fast, la nueva canción Burnout The Nitro y Back In The Game. En Girls In Black Joel se subió a hombros de un asistente y correteó entre el público al tiempo que ‘estalló’ la primera cerveza contra su cabeza.

Rebajaron la tensión con una extendida Bottom Of The Well en la que incluso reclamaron que los seguidores prendieran las luces de sus móviles o mecheros. Volvieron a la carga con Breakin’ Outta Hell e It’s All For Rock ‘n’ Roll en la que montaron su clásico bar dedicado a Lemmy de Motörhead para brindar con los fans. Acto seguido volvieron a reivindicar su nueva obra con el tema título; Boneshaker.

El batería Ryan O’Keeffe activó una sirena que dio paso a Live It Up en la que Joel instó a la audiencia a que viva el momento sin pensar en el futuro. En este tema el frontman lanzó cervezas a los fans, que alguno llegó a coger al vuelo. Enlazaron con Stand Up For Rock ‘n’ Roll en la que Joel pidió a la audiencia que se agachara para instantes después alzarse por el rock ‘n’ roll.

Había llegado el momento de unos bises para los que reservaron dos de sus mayores clásicos; Ready To Rock y Runnin’ Wild completando un concierto de altura con un sonido que en ocasiones llegó a ser estridente. Airbourne, herederos de la escuela AC/DC, están culminando una década en la que se han consolidado entre las grandes bandas del género llegando a las posiciones de privilegio en los festivales de rock y metal. Y están decididos a que esa tendencia no cambie. Boneshaker es su nueva carta sobre la mesa.

AIRBOURNE SETLIST
Raise The Flag
Too Much, Too Young, Too Fast
Burnout The Nitro
Back In The Game
Girls In Black
Bottom Of The Well
Breakin’ Outta Hell
It’s All For Rock ‘n’ Roll
Boneshaker
Live It Up
Stand Up For Rock ‘n’ Roll

Ready To Rock
Runnin’ Wild

AIRBOURNE

SUPERSUCKERS