Ha llegado la hora del adiós para Kiss, que se materializará hoy y mañana (1 y 2 de diciembre) con sendos conciertos finales en el Madison Square Garden de Nueva York. Supondrán la despedida de la icónica banda, aunque recientemente Gene Simmons ya adelantó que se trataba del final del grupo, pero no de la marca.
Se han organizado diferentes iniciativas en Nueva York para acompañar estos dos conciertos finales de Kiss. Entre ellas destaca sobremanera el espectáculo de luces y sonido que ha engalanado el no menos legendario rascacielos Empire State Building, testigo de los cielos de La Gran Manzana desde 1931. Se ha proyectado un juego de luces en honor a la banda sobre el edificio que fue considerado el más alto del mundo hasta 1970. El himno Rock And Roll All Nite ha sido el elegido para acompañar esta celebración.
Y fue precisamente en la década de los setenta cuando este coloso también estuvo vinculado con Kiss, puesto que allí la banda posó para unas icónicas fotos promocionales en la plataforma de observación del piso 86.
Los cuatro miembros de Kiss estuvieron ayer en el Empire State Building, donde recibieron el reconocimiento por su larga trayectoria y vinculación a Nueva York. Tal como reconocieron Paul Stanley y Gene Simmons, la banda dio sus primeros pasos muy cerca de allí.
“Por primera vez en la historia… ¡Kiss ilumina el Empire State Building en honor a los 50 años de historia de la banda y su origen en la ciudad de Nueva York! El espectáculo especial de esta noche forma parte de la celebración de una semana de la banda en la Gran Manzana, todo ello previo a sus últimos conciertos en el Madison Square Garden el 1 y 2 de diciembre”, han detallado en las redes sociales de Kiss.
