Z! Live 2025 arrancó su décima edición apoyado por un tiempo favorable. Sin lluvias y con un calor soportable a lo largo de las tres jornadas, lo que sirvió para dar todo el protagonismo a la música. El primer día estuvo especialmente dedicado al metal progresivo y al extremo con el liderazgo de Dream Theater en la celebración de su 40 aniversario.
VOLA
Los primeros en salir a escena fueron After Lapse, una banda de metal progresivo de Madrid, que contaron con un nuevo vocalista en su presentación en Zamora. Los siguieron los daneses Vola, aunque el vocalista y guitarrista Asger Mygind matizó que venían desde Dinamarca y Suecia en reconocimiento a su batería, Adam Janzi.
Los nórdicos se adentraron en la tarde zamorana con su rock y metal progresivo con numerosos matices y flecos hacia otros estilos. En un tono relajado su propuesta está más orientada a las salas que a un festival, puesto que su música se presta a ser degustada con atención y cercanía.
El protagonismo mayoritario recayó en un Asger Mygind capaz de alternar las voces con la guitarra y salir victorioso en el esfuerzo. Técnicos y progresivos, contaron con una base de teclado que arropó su música. Aunque su trayectoria se acerca a los veinte años, en Zamora dieron un protagonismo prácticamente absoluto a sus dos últimos trabajos; Witness (2021) y Friend Of A Phantom (2024).
Abrieron con temas como We Will Not Disband, Stone Leader Falling Down, Paper Wolf… Asger se acercaba al filo del escenario en los pocos instantes que podía alejarse del micrófono. En la segunda parte de su show incluyeron canciones como Cannibal, un tema en el que contaron con la colaboración de Anders Fridén de In Flames en el estudio, Inside Your Fur, Bleed Out con el público más animado y una de sus mayores apuestas; Straight Lines. Completaron una gran actuación, aunque costase disfrutarla para quienes no están habituados a la propuesta de Vola.
KISSIN’ DYNAMITE
Con una trayectoria similar en cuanto a años se refiere con respecto a Vola, pero con un estilo diametralmente diferente. Desde Alemania llegaban Kissin’ Dynamite con todas las bazas necesarias para triunfar en un festival, puesto que su propuesta es festiva a más no poder. Con una mezcla de hard rock y heavy metal, salieron a por todas tras superar unos problemas con el sonido al inicio de su actuación.
En Zamora abrieron con Back With A Bang, el tema que da título a su último disco de estudio, al que siguieron con DNA y No One Dies A Virgin. Buena parte del peso del show recae en el frontman Johannes (Hannes) Braun, siempre con una sonrisa en la cara y con un afán constante por entretener a la audiencia. En Zamora no faltaron las clásicas poses de los componentes, incluida su ‘pirámide’ inspirada en Scorpions.
Supieron conectar con la audiencia con canciones como I’ve Got The Fire o My Monster. Hannes, que se autoproclamó rey con una capa, se esforzó en hablar en español y contagió su divertida puesta en escena. Cerraron con Not The End Of The Road, You’re Not Alone y la nueva Raise Your Glass siendo el contrapunto en una primera jornada más dedicada al metal progresivo y extremo.
NILE
Giro diametral en el Z! Live 2025 cuando se pasó de Kissin’ Dynamite a Nile, uno de los pesos pesados del death metal a escala internacional. De un tono festivo a un rictus más serio, que el líder de la banda, Karl Sanders, rompió en los instantes previos al show. No pudo evitar esbozar varias sonrisas mientras miraba a los espectadores de las primeras filas.
La banda originada en Carolina del Sur (Estados Unidos) llegó a Zamora con una formación renovada, que presentaron el año pasado al publicar su última obra; The Underworld Await Us All (2024). Destaca su flamante fichaje; Dan Vadim Von, bajista y vocalista ruso afincado en Estados Unidos, que también ejerce de guitarrista en Morbid Angel.
En Zamora emprendieron su camino por su última obra con temas como To Strike With Secret Fang para acto seguido arremeter con material del principio de su catálogo; Sacrifice Unto Sebek y Defiling The Gates Of Ishtar. Irrumpieron con su death metal técnico y brutal inspirado en Egipto e impulsado por Dan Vadim Vom con unas maneras muy ortodoxas dentro del género. Sus miradas desafiantes y sus poses estudiadas seguían claramente la tradición del death y el brutal death americano.
Dan contó con la colaboración en las voces de sus compañeros, incluido Karl Sanders. En ocasiones el sonido se entrecortaba por instantes amenazando su propuesta. El death metal con ambientación egipcia emergía en canciones como Kafir!, Vile Nilotic Rites, In The Name Of Amun… Para el final de su show de decantaron por temas clásicos; Lashed To The Slave Stick y Black Seeds Of Vengeance. Fue una buena oportunidad de ver a uno de los grandes nombres del death metal americano, aunque el sonido les jugó una mala pasada.
EXODUS
Exodus es uno de los pesos pesados del thrash metal y uno de los grandes nombres del metal en general. Perfectamente podrían haberse erigido en cabezas de cartel de una de las jornadas del Z! Live 2025. Sin embargo, ocuparon una posición más discreta y contaron con menos tiempo que Meshuggah y lógicamente que Dream Theater, los grandes protagonistas de la jornada inaugural.
La primera alegría fue ver alzarse tras su batería a Tom Hunting, quien hace cuatro años tuvo que enfrentarse a la dura batalla que le planteó un tumor gástrico. La novedad de Exodus en Zamora era volverlos a ver con el vocalista Rob Dukes, quien ha regresado a la banda americana reenganchándose tras su primer periplo que duró desde 2005 a 2014. Ocupa de este modo el puesto del clásico vocalista Steve ‘Zetro’ Souza, quien ha salido del grupo tras su tercera etapa como frontman.
Otra buena noticia para los fans de Exodus fue ver al sensacional guitarrista Gary Holt, que ahora vuelve a tener que compaginar su agenda con la de los ‘resucitados’ Slayer. De este modo y con una formación de gala, Exodus salió a por todas tras la intro del We Will Rock You de Queen, que bien podrían haber remodelado como “We Will Thrash You”. Así lo hicieron a conciencia con Bonded By Blood, War Is My Shepherd y Brain Dead de entrada.
La clásica sección rítmica compuesta por Tom Hunting (batería) y Jack Gibson (bajo) fraguó la base para el lucimiento de los guitarristas Lee Altus (también en Heathen) y Gary Holt. El cantante Rob Dukes no venía a hacer amigos. Desafiaba con la mirada y se desgañitaba al son de clásicos como Fabulous Disaster. Su competencia para liderar a Exodus está fuera de dudas, como también lo estaba la de Steve ‘Zetro’ Souza. Cada fan tendrá su preferencia personal.
El riff de Gary Holt sonó demoledor, puro metal, en el inicio de Deathamphetamine antes de un poderoso bramido de Rob Dukes. No había tregua en la actuación de Exodus: Blacklist, The Beatings Will Continue (Until Morale Improves)… “Hemos venido a impartir una lección de violencia”, avanzó el cantante en la introducción de A Lesson In Violence. También podía haber dicho que habían acudido a ofrecer una lección de metal y hubiera servido igual.
La brutal descarga de thrash de una hora se completó con una traca de clásicos: Piranha, The Toxic Waltz precedida por la intro de Raining Blood de Slayer, y Strike Of The Beast. Exodus habían triunfado a su paso por el Z! Live 2025 demostrando una vez más que los grandes nombres del thrash metal son un seguro para todo festival. Exodus son palabras mayores dentro del metal.
MESHUGGAH
Los suecos Meshuggah ocuparon una posición de privilegio como antesala a la actuación de los cabezas de cartel: Dream Theater. Exponentes de un estilo vinculado a ellos mismos; el djent, un subgénero del metal progresivo, a los escandinavos se les ha asociado con géneros dispares, como el groove metal, death metal progresivo, death técnico, math metal… Un sinfín de términos para intentar descifrar la personal idiosincrasia de Meshuggah.
Lo cierto es que han creado escuela y por su estela transitan un buen elenco de bandas. Su espectáculo en Zamora resultó hasta hipnótico destacando por la elevada técnica musical y por una cuidada puesta en escena con láseres que atravesaban a unos músicos mayoritariamente estáticos. Metal extremo estudiado al milímetro que desde luego no está destinado para todos los públicos. Sus fans los recibieron con entusiasmo y hasta con cánticos. Para el resto era una propuesta que costaba digerir. En lo que la mayoría coincidieron es en que su calidad está fuera de dudas. En las pocas interacciones con el público el vocalista avanzó que los bises eran “canciones de heavy metal”. Se refería a Bleed y Demiurge.
ROTTING CHRIST
Tras la actuación de Dream Theater, el metal extremo volvió a apoderarse de los terrenos de Ifeza. En esta ocasión toda una institución de Grecia: Rotting Christ. La oscuridad se sumió sobre el Z! Live cuando salió a escena la banda de los hermanos Tolis. Subirse a escena después de las bandas principales nunca es una posición fácil en un festival. Sin embargo, los de Atenas sabían que tenían que ganarse al público desde el minuto uno cuando todavía duraba la resaca de Dream Theater, y así lo hicieron.
Transitando entre el black metal melódico y el gótico, los griegos implicaron plenamente a la audiencia con un set en el que interpretaron canciones como Fire, God And Fear, Like Father, Like Son de su último disco (Pro Xristou, 2024), Elthe Kyrie o todo un recuerdo a los albores de la banda. Ni más ni menos que Non Serviam.
El vocalista y guitarrista Sakis Tolis comandaba la banda con decisión y se esmeró en hablar español para buscar una mayor cercanía con la audiencia. En la retaguardia estaba su hermano, Themis Tolis, retumbando su batería con contundencia. El bajista y guitarrista que se suman a la formación de directo de Rotting Christ contribuyeron al buen destino al que se encaminó la banda helena.
En la recta final interpretaron la versión de Societas Satanas de Thou Art Lord en la que milita el propio Sakis, Grandis Spiritus Diavolos y The Raven completando una intensa hora que los aficionados disfrutaron ya de madrugada. Tras el paso de Rotting Christ, la primera jornada de Z! Live 2025 se cerró con la actuación de Vita Imana.
VOLA
KISSIN’ DYNAMITE
NILE
EXODUS
MESHUGGAH
ROTTING CHRIST
