LEGION
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Zorrotzako Gaztetxe (Bilbao)
11 de marzo de 2023
Zorrotza es un barrio de Bilbao ubicado en el extremo oeste de la villa y una puerta de entrada si se accede desde Barakaldo. Sin embargo, está muy vinculado con la Margen Izquierda tanto por su situación como por su contexto social. Una Margen Izquierda a la que ayer miraron los catalanes Legion desde su atalaya del escenario del Zorrotzako Gaztetxe, al igual que hicieron hace 30 años cuando actuaron en la sala Múnich 72 de Santurtzi compartiendo cartel con Beer Mosh.
El mundo ha dado muchas vueltas desde entonces y Legion, uno de los grandes pioneros del thrash metal en España, permanecieron en el limbo la friolera de 27 años. En 2021 anunciaron su regreso y el año pasado lo rubricaron publicando el EP Legionized y volviendo a pisar los escenarios, tal como hicieron en el festival Leyendas Del Rock 2022.
Inmersos en la gira ‘Legionized’ y ya con un rodaje más consolidado, los de Barcelona arrancaron el concierto al ritmo de uno de sus mayores clásicos; Lethal Liberty, la canción que daba título a su disco de debut con el que consiguieron ponerse en el mapa del metal a finales de los ochenta. Las dimensiones considerables del escenario del Zorrotzako Gaztetxe les permitió presidir la actuación con un enorme telón con el logo de la banda. Ante ellos una audiencia de alrededor de 150 espectadores.
Enlazaron Dark Force con Beyond Betrayal en un inicio de concierto muy serio que demostró el buen nivel de la banda. “Esta canción es muy especial para mí, porque habla sobre mi fe y lo que yo creo”, avanzó el vocalista y bajista Jonathan Dolcet en la presentación de Eternal Youth. El frontman comentó que las grandes bandas a pesar de sacar nuevos discos continúan defendiendo sus clásicos en directo. Y eso mismo es lo que hicieron ellos al apostar por Rhythm Rider.
Jonathan ha recuperado la forma, como si los años alejado de la escena se hubieran diluido de inmediato. A su derecha; el guitarrista Quimi Montañés, muy activo como de costumbre y contorsionándose en los solos. Ambos conforman el núcleo veterano de la banda. Ellos vivieron el auge de Legion a finales de los ochenta y comienzos de los noventa. Cuentan con el importante impulso de los nuevos componentes; el batería Miguel Ángel Rodríguez y el guitarrista Toni Rodríguez.
Encadenaron Feel The Pain con A Matter Of Greed, antes de realizar la primera versión de la noche: We Will Rock You de Queen. Mili K.K. fue una de las canciones que mayor reacción logró entre la audiencia. Aunque la temática pueda parecer desfasada, el propio Jonathan Dolcet alertó de que no es descartable que el servicio militar pueda volver en el futuro. Continuaron en castellano con La Ruina. A modo de primicia desvelaron que volverán a Bizkaia en junio para actuar en el festival Kabiefest Metal 2023 en Kabiezes (Santurtzi), la misma localidad donde ya tocaron en 1993.
La temática bélica dominó en Bag Full Of Meat con referencias a Vietnam y en Young Soldier, otro de los temas más coreados. En su introducción el cantante recordó que “están muriendo chavales todos los días en la puta guerra”. Completaron el set con This Can’t Be Real y abandonaron el escenario.
Los de Barcelona volvieron a escena al ritmo de They Call Me War, antes de rebajar la intensidad con la versión de Rebel Yell de Billy Idol que ellos denominan Level Yell. “Vosotras y vosotros nos tenéis poseídos”, anunció Dolcet en la introducción de otro de sus mayores clásicos, Possessed, con el que cerraron un gran concierto en Zorrotza.
Queda claro que Legion están de vuelta, ya rodados sobre los escenarios, demostrando su categoría y reivindicando su legado de thrash metal, que ellos contribuyeron sobremanera a la hora de introducirlo en España. Ahora queda por ver si la banda también apostará por publicar un disco con material nuevo y extender su historia.
Endgame
Los teloneros de Legion en Bilbao fueron Endgame, una banda de heavy metal de Vitoria, que actuó ayer por primera vez en Bizkaia. Ya habían compartido escenario con Legion en esta gira y evidenciaron la buena sintonía entre ambas bandas. Desgranaron una buena ristra de temas contundentes liderados por la aguerrida voz del cantante y conectaron con los espectadores más entusiastas de las primeras filas. Para el final dejaron una versión de Fast As A Shark de Accept.
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