Lita Ford, Gotthard, Rhapsody Of Fire, Dynazty y Ankhara en Z! Live 2025

La tercera jornada arrancó con la participación de la banda británica de heavy progresivo Opensight, que se presentó uniformada a primera hora de la tarde y con una pequeña legión de seguidores que llegaron hasta Zamora para apoyarlos.

ANKHARA

A diferencia de la jornada anterior, el tercer día de Z! Live 2025 solo contó con unos representantes españoles. Se trataba de la veterana banda de Madrid Ankhara, quienes salieron a escena comandados por sus componentes clásicos; el vocalista Pacho Brea y los guitarristas Cecilio Sánchez y Alberto Marín.

Durante 50 minutos realizaron un repaso de algunos de sus temas más reconocidos coronados por la personal voz de Pacho. En una de las esquinas Alberto Marín era quien más se agitaba aportando un mayor dinamismo a su actuación. Recrearon discos como su debut, Dueño Del Tiempo (1999), con canciones como Un Paso Más, No Mires Atrás o Hasta El Fin, o Sinergia (2018) con cortes como Sueña o Sigo En Pie.

DYNAZTY

Oriundos de una de las grandes ciudades del hard rock y el heavy metal en Europa, Estocolmo (Suecia), Dynazty salió a uno de los escenarios del Z! Live ante la expectación de una nutrida audiencia. Impulsados por la ayuda de samples, como una buena parte de las bandas actuales, los escandinavos realizaron un gran comienzo de actuación con canciones como Game Of Faces, que titula su último disco de estudio, Natural Born Killer…

A la cabeza del grupo nórdico se situaba el extraordinario vocalista Nils Molin, a quien muchos también conocen por ser uno de los cantantes de Amaranthe. También milita en New Horizon junto con Jona Tee de H.E.A.T. Se erigió sin duda como una de las grandes voces de todo el festival, tanto por su técnica como por su potencia. Los suecos apuestan por un heavy melódico con buenas canciones e influencias de hard rock y power metal. Y lo hacen a la vieja usanza; sin disfraces ni ropajes excesivos. Los guitarristas sorprendieron realizando un solo conjunto mientras bebían de unas latas.

Tras Call Of The Night decidieron realizar un solo de batería, lo que fue cuestionable en una actuación de una hora. En la recta final interpretaron canciones como Presence Of Mind y The Human Paradox. En esta fase realizaron unas presentaciones de los músicos excesivas y cánticos con la audiencia que pararon otra vez el buen ritmo de su propuesta.

Completaron su actuación con la coreada Heartless Madness. Fue una pena que interrumpieran en exceso su concierto con el solo de batería, los cánticos y las presentaciones. Seguramente podrían haber interpretado dos o tres canciones más, lo que hubiera redondeado una actuación sobresaliente.

RHAPSODY OF FIRE

Tras Dynazty llegó el turno para los italianos Rhapsody Of Fire, que arrancaron con uno de los clásicos de los antiguos Rhapsody; Unholy Warcry. El único componente que perdura de la formación original es el teclista Alex Staropoli, quien rehúye del protagonismo situándose en la parte trasera del escenario. Las canciones más actuales ocuparon la primera parte del show donde resaltó la gran voz de Giacomo Voli.

The March Of The Swordmaster dio paso a Challenge The Wind con unos coros grabados excesivos. Rebajaron la tensión con The Magic Of The Wizard’s Dream y el recuerdo a Christopher Lee, cuya voz retumbó en Zamora prácticamente diez años después de su fallecimiento. Las canciones de los últimos discos protagonizaron la segunda parte de la actuación. Enlazaron; Chains Of Destiny, Warrior Heart y Kreel’s Magic Staff.

La contundencia del batería, los solos de Roberto De Micheli que recuerdan a los de Luca Turilli y un Giacomo Voli soberbio destacaron en la actuación de Rhapsody Of Fire. Los viejos fans de la banda transalpina agradecieron sobremanera los dos clásicos que sirvieron de colofón: Dawn Of Victory coronado por un gran grito final de Voli y Emerald Sword.

En ocasiones costaba desmenuzar lo que sonaba en directo en relación con los apoyos pregrabados, aunque es una sensación muy habitual con numerosas bandas en la actualidad. Los italianos también pecaron de un exceso de medios tiempos y se echaron en falta algunos clásicos más de los Rhapsody que revolucionaron el metal en Italia en la segunda mitad de los años noventa.

GOTTHARD

Palabras mayores dentro del hard rock a escala mundial. Los suizos Gotthard llegaron al Z! Live 2025 para demostrar lo que significa una banda ‘premium’ a todos los niveles. Y además venían con un disco nuevo bajo el brazo, Stereo Crush (2025), al que le dieron prioridad de entrada con canciones como; AI & I y Thunder & Lightning. No tardaron en mirar por el retrovisor para recrear All We Are del Lipservice y su versión de Hush de Joe South que también popularizó Deep Purple.

Ya de entrada se podía percibir cada instrumento y cada nota de forma orgánica. Allí no había ningún tipo de trucos, solo un grupo de instrumentistas y un vocalista demostrando su técnica y su sentido musical. El guitarrista Leo Leoni se mostraba muy activo y disfrutando con una sonrisa de oreja a oreja. Más estáticos se encontraban en el otro lado de la escena el bajista Marc Lynn y el guitarrista Freddy Scherer.

Enlazaron todo un clásico de los noventa, Mountain Mama, con el nuevo tema Burning Bridges. Ya son trece los años que lleva el cantante Nic Maeder al frente de Gotthard en los que ha rubricado un total de cinco discos. Aunque técnicamente está más que capacitado para el puesto, dista mucho de la potencia de voz y del carisma que tenía Steve Lee. Le honra el que nunca ha intentado calzarse los zapatos de su predecesor y siempre ha preferido seguir su propio camino.

Con Anytime Anywhere abrieron una segunda parte del show destinada a los clásicos más reconocibles para el gran público. Heaven, Feel What I Feel y Top Of The World protagonizaron una de las mejores fases de su actuación. Con Lift U Up todos los fans se pusieron a saltar en una recta final muy intensa que remataron con la versión de Quinn The Eskimo (The Mighty Quinn) de Bob Dylan. Independientemente de gustos y estilos, bandas como Gotthard son un lujo para cualquier festival.

LITA FORD

Una de las grandes bazas de la décima edición de Z! Live 2025 ha sido la inclusión de Lita Ford en su cartel. Tanto por la importancia que tuvo en los setenta, ochenta y primeros noventa como una de las mujeres pioneras en el heavy rock como por lo difícil que ha sido verla en España a lo largo de su extensa carrera. Algunos de sus fans todavía recuerdan su paso por el festival Metalway de Zaragoza en 2009.

Lita llegó a Zamora tras participar en el festival BBK Music Legends Fest en Bilbao un día antes. Y lo hizo acompañada por una banda de entidad en la que destacaba el conocido batería Bobby Rock (Vinnie Vincent Invasion, Nitro, Nelson…). El grupo lo completaban el guitarrista Patrick Kennison y el bajista sueco Marten Andersson.

Aunque comenzaron con algunos titubeos motivados por el sonido, no tardaron en meterse de lleno en acción con Can’t Let Go y Larger Than Life. Lita compaginaba la guitarra con una voz que sigue manteniendo los matices reconocibles para sus seguidores. Además, realizó una puesta en escena decidida y con mucha confianza avalada por su una experiencia contrastada.

Enlazaron Restless con la versión de The Bitch Is Back de Elton John y con Playin’ With Fire coronada por un solo de guitarra de Lita Ford. Posteriormente entró en acción toda la banda con un gran solo de bajo de Marten Andersson impulsado por el acompañamiento de batería de Bobby Rock, que desembocó en una exhibición del guitarrista Patrick Kennison. Una sección instrumental de alto voltaje.

Tras Can’t Catch Me Bobby Rock volvió a asumir el protagonismo con un extraordinario solo de batería en el que no faltó el clásico ‘tren’ que también suele realizar Tommy Aldridge. Es verdad que hubo quien criticó el excesivo tiempo que dedicaron a las secciones instrumentales, pero hay que reconocer que la gran calidad musical hizo que merecieran mucho la pena.

En la segunda parte del concierto aceleraron al ritmo de Cherry Bomb, un recuerdo a la famosa banda de adolescencia y juventud de Lita: The Runaways, a la que siguieron las versiones de Black Leather de Sex Pistols y Only Women Bleed de Alice Cooper. Lita exhibió su guitarra de doble mástil para uno de los momentos cumbre de su actuación. Tal como avanzó ella misma, había llegado la hora de la emotiva Close My Eyes Forever, el famoso dueto que realizó con Ozzy Osbourne a finales de los ochenta. En Zamora realizaron una adaptación fuera de serie con la gran aportación de Kennison asumiendo las partes de Ozzy.

Cerraron el concierto con Kiss Me Deadly, uno de los mayores clásicos de Lita Ford, completando 70 minutos que encantaron a los seguidores de la guitarrista y vocalista. Además del gran estado de Lita, también influyó sobremanera la calidad de una banda que dejó una rubrica para el recuerdo tras su paso por Zamora.

LITA FORD

GOTTHARD

RHAPSODY OF FIRE

DYNAZTY

ANKHARA