BARÓN ROJO
PANZER
Santana 27, Bilbao
21 de mayo de 2022
Texto y fotos: Pedro Alonso
Anoche la parroquia devota del heavy clásico español asistió a un acontecimiento histórico. El primer concierto de Panzer en Bilbao en toda su carrera y el último de Barón Rojo en la villa si se mantienen fieles al lema de la ‘gira de despedida’ que preside los carteles de sus actuaciones. Una palabra que ha sido desvirtuada al extremo por otros grandes nombres del hard rock y el heavy metal y que en la actualidad no muchos aficionados se toman demasiado en serio.
La pandemia interfirió de forma rotunda en los planes de despedida de Barón Rojo en 2020. Aquel deseo de unificar el 40 aniversario de la banda con un adiós definitivo tuvo que quedarse en suspenso, al igual que todo el negocio de la música en vivo. El colofón previsto en el WiZink Center de Madrid en diciembre de 2020 se pospuso un año y se celebró con menos boato del esperado, inmersos en plena sexta ola de la pandemia tras la irrupción de ómicron.
Una vez relajadas las restricciones contra el virus en cuanto a los conciertos se refiere, Barón Rojo está aprovechando 2022 para desplegar las alas y ejecutar el programa de directo que se quedó en el limbo en 2020. La legendaria banda de heavy metal tiene, de momento, actuaciones previstas hasta finales de diciembre, incluyendo una gira por Estados Unidos el próximo mes de junio y otra por Latinoamérica en otoño.
PANZER
El acierto de invitar a Panzer se pudo comprobar desde la fila que aguardaba la apertura de puertas de Santana 27. Buena parte de los asistentes tenían pendiente ver a una banda que brilló en los ochenta y que posteriormente se diluyó completamente, aunque volvió a reactivarse de forma discontinua en las últimas décadas.
Dos carteles de ‘Al Pie Del Cañón’ y ‘Toca Madera’ con la legendaria abuela Ángeles adornaban la escena cuando los madrileños irrumpieron con tres de los componentes originales: el vocalista Carlos Pina, el bajista Fernando Díaz-Valdés y el batería Rafael Ramos. Completaba la formación el guitarrista Miguel Ángel ‘Cachorro’ López.
Sin más preámbulos arremetieron con Toca Madera, su clásico más reconocible, que enlazaron con otro himno; Dios Del Rock. El propio Carlos Pina confirmó que era el primer concierto de Panzer en Bilbao antes de abordar Galones De Plástico. Ya desde el inicio quedaron muchos puntos claros. Carlos Pina demostró que sigue manteniendo el color de una voz completamente reconocible con la que despuntó en los cuatros discos de estudio que publicaron en los ochenta. La banda sonaba nítida dejando parte del protagonismo del show en su guitarrista, que se contorsionaba sin parar.
La afición alzó los puños y coreó con fuerza No Hay Quien Nos Pare y un muy extendido Perro Viejo. Pina eliminaba los silencios entre los temas cantando a capela y captando la atención de los fans. Uno de los momentos más emotivos llegó con Junto A Ti, una de las grandes baladas del heavy español.
Danza De La Muerte cogió a contrapié a más de uno, puesto que Carlos la anunció como Panzer. Sus coros característicos dieron paso a Caballeros De Sangre ya en la recta final. Y, ahora sí, Panzer sirvió de colofón a una actuación de poco más de 50 minutos, que supo a poco. Un par de temas más hubiesen redondeado un concierto que gustó a buena parte de los seguidores, que habían conseguido ver a una banda que se codeó con los más grandes del heavy español, pero que lamentablemente no consiguió la misma fama.
BARÓN ROJO
Una Plaza Nueva abarrotada en plena Aste Nagusia de 1989 con la formación original en la gira de Obstinato y teloneados por Sangre Azul, un pequeño pero entusiasta concierto en el barrio de Masustegi en 1994 con aficionados colgados del escenario o su actuación en la explanada de Botica Vieja en Deusto en 2007 en una lluviosa noche que quedó inmortalizada en el directo Desde Barón A Bilbao… Son solo algunos de los lazos que unen a Barón Rojo con Bilbao, una ciudad que no podía quedarse fuera de su gira de despedida.
Anoche incluso salieron antes de lo previsto cuando todavía faltaban diez minutos para las nueve de la noche, aunque en el exterior todavía brillaba la claridad. Arma Secreta fue la encargada de disparar las hostilidades, enlazada por el primer clásico; Hermano Del Rock & Roll, y por Alí-Babá Y Los Cuarenta del Desafío. En la primera parte del concierto Barón Rojo quiso poner en valor las canciones que pertenecen a sus tres últimas décadas, su etapa más extensa y la que iniciaron cuando separaron su camino del de Sherpa y Hermes Calabria.
No era fácil predecir el repertorio durante la primera hora del concierto, donde encadenaron Incomunicación con Cueste Lo Que Cueste, Herencia Letal e Invulnerable. Los fans menos avezados en la banda se perdieron un poco con Fronteras y El Rey Del Pinball de su homenaje a The Who; Tommy Barón.
El grupo había salido con buen pie y con un Armando De Castro desatado, como es su costumbre. Desde luego no está para jubilarse de la música. Alternó el protagonismo al micrófono con su hermano Carlos, cuya voz estaba en mejor estado que en algunos conciertos antes de la pandemia. Como punto negativo, un sonido demasiado saturado, en ocasiones embarullado, que lastraba su propuesta.
Las Flores Del Mal fue un claro punto de inflexión en el concierto, que a partir de ese momento entró en la fase de clásicos que tanto ansiaba buena parte de la audiencia. Caso Perdido fue uno de los grandes momentos de la noche antes de los himnos Larga Vida Al Rock And Roll y Concierto Para Ellos. Loaron al compositor italiano Vittorio Monti con Czardas como introducción a Son Como Hormigas. Entonces ya tenían a la audiencia en el bolsillo cuando apostaron por otro caballo ganador: Los Rockeros Van Al Infierno.
Se metieron al camerino para volver a salir al ritmo de Con Botas Sucias en la que insertaron Born To Be Wild. El slide guitar de Armando sobresalió en Satánico Plan (Volumen Brutal) y la fiesta estalló con Cuerdas De Acero e Hijos De Caín, dos canciones de En Un Lugar De La Marcha que supusieron un cénit en la despedida de Barón Rojo en Bilbao. La energía de Armando contrastaba con un Carlos más pausado y que en la parte final del show tenía más dificultades para cantar. Eso sí, de vez en cuando llamaba la atención con unos gritos sorprendentes. Muy activo también estuvo el bajista José Luis Morán.
No aflojaron el pistón con la contundencia de Resistiré, completando un extenso repaso a su obra cumbre; Volumen Brutal (1982). El clamor no cesó, pero sí se rebajó para disfrutar de Siempre Estás Allí en lo que parecía claramente el final de su concierto. Pero no, todavía volvieron a salir a escena para celebrar al ritmo de Barón Rojo y para sorprender con Chica De La Ciudad, que muy pocos hubieran apostado como tema de cierre en Bilbao.
En total cerca de dos horas y media de un buen concierto de Barón Rojo solo empañado por el sonido. Un repertorio variado en el que no faltaron buena parte de sus imprescindibles, aunque el legado de la banda es tan grande que cada seguidor seguro que echó de menos algunos de sus favoritos.
Tal como se puede ver en su página web, la banda todavía tiene un extenso e internacional itinerario por delante en lo que resta de 2022. Queda por conocer cuándo será su último vuelo definitivo. Tomen la decisión que tomen, lo que queda claro es que los clásicos que dejan, especialmente los grabados por la formación original en los ochenta, perdurarán para siempre.
BARÓN ROJO – REPERTORIO
Arma Secreta
Hermano Del Rock & Roll
Alí-Babá Y Los Cuarenta
Incomunicación
Cueste Lo Que Cueste
Herencia Letal
Invulnerable
Fronteras
El Rey Del Pinball
Las Flores Del Mal
Caso Perdido
Larga Vida Al Rock And Roll
Concierto Para Ellos
Czardas
Son Como Hormigas
Los Rockeros Van Al Infierno
Con Botas Sucias
Satánico Plan (Volumen Brutal)
Cuerdas De Acero
Hijos De Caín
Resistiré
Siempre Estás Allí
Barón Rojo
Chica De La Ciudad
PANZER – REPERTORIO
Toca Madera
Dios Del Rock
Galones De Plástico
No Hay Quien Nos Pare
Perro Viejo
Junto A Ti
Danza De La Muerte
Caballeros De Sangre
Panzer
