“El tiempo pasa, pero el metal vive para siempre”. Toda una declaración de uno de los grandes artífices del género: Rob Halford, frontman de Judas Priest. El cantante lanzó esa manifestación de peso hace unos días en las redes sociales.
Un alegato en favor de un género musical, denostado en muchas ocasiones y en los foros más dispares, que llega en un momento en el que se cuestiona su viabilidad de cara al futuro. El relevo generacional no está claro a día de hoy, surgen declaraciones como las de Gene Simmons de Kiss que afirman que el rock ha muerto… En medio de ese pesimismo destaca la defensa de Halford por la perdurabilidad del heavy metal.
El metal ha sobrepasado el medio siglo de vida y se ha adaptado a infinidad de cambios, tanto de tendencias musicales, medios de difusión, formatos… Ramificado en numerosos subgéneros, el hard rock y el heavy metal siguen muy vivos a día de hoy. Una de las pruebas fehacientes son la cantidad de festivales de estos géneros que salpican los diferentes países de Europa, y que en algunos de los casos más sonados cuelgan el cartel de ‘sold out’ un año antes de celebrare.
Si hay algo claro sobre el futuro es que nadie lo puede predecir con exactitud. Las tendencias musicales son cambiantes y, aunque el rock y el heavy metal no sean estilos muy populares entre los adolescentes y jóvenes de hoy, no se puede garantizar qué sucederá en las próximas décadas. Al menos Halford lo tiene muy claro: “El tiempo pasa, pero el metal vive para siempre”.
