JAG PANZER
SINNER RAGE
Groove, Portugalete (Bizkaia)
26 de septiembre de 2025
No hay mejor modo de vivir el heavy metal que en una pequeña sala o un club codo con codo con otros fans y con una banda con pedigrí en el estilo al alcance de la mano. La energía se transmite de forma bidireccional retroalimentando tanto al público como a los artistas. En Groove en Portugalete (Bizkaia) ya tienen experiencia de sobra en albergar conciertos de bandas legendarias de metal. Omen, Praying Mantis, Flotsam And Jetsam, Heathen, Warrant… Anoche sumaron una muesca más con el desembarco de la banda originada en Colorado (Estados Unidos) Jag Panzer.
Héroes de culto del heavy/power metal americano, Jag Panzer es una de las bandas que nunca alcanzó ni de lejos las cotas de popularidad que merecían, lo mismo que les sucedió a tantos otros coetáneos. Cantera de reputados músicos que han pasado por sus filas a lo largo de los años, como los guitarristas Joey Tafolla y Chris Broderick (In Flames, ex Megadeth…), cuentan con uno de los grandes frontmen del heavy metal estadounidense; Harry ‘The Tyrant’ Conklin (Titan Force, Cloven Hoof, Heir Apparent, Satan’s Host, The Three Tremors, ex Riot).
El funcionamiento de Jag Panzer es cuando menos muy peculiar. Su sección rítmica; el bajista original John Tetley y el batería Rikard Stjernquist, permanecen en la banda, pero actualmente no están tocando en directo. A esto se suma que el guitarrista fundador Mark Briody se ha ausentado por primera vez de los escenarios de Jag Panzer en esta gira europea por un motivo que no ha detallado. En un comunicado aseguró que era algo ‘puntual’ y descartó algunos motivos que podrían barruntar sus fans: “No, mi pasaporte no ha caducado, no estoy enfermo y no tengo problemas legales”, comentó Briody.
Por lo tanto, en Portugalete los americanos llegaron con tres músicos de directo que conforman una clara unidad B en la que solo estaba el vocalista Harry Conklin como único miembro fundador y el guitarrista Ken Rodarte, que lleva como componente oficial de Jag Panzer desde 2022, aunque ya había tocado en directo con el grupo desde 2018. Los otros músicos presentes eran el bajista Aric Avina, que ya lleva actuando con la banda desde hace diez años, el joven batería de 26 años Jacob Lee Coleman y el guitarrista suplente de Briody; Casey Trask (Cage, Monarch, The Three Tremors…).
Ante una Groove que presentaba una buena entrada en la que también influyó la presencia de la joven banda vitoriana Sinner Rage. Melena al viento, camiseta de Jag Panzer y un atuendo muy heavy en el que destacaban unos zuecos con remaches, Harry ‘The Conklin’ Tyrant lideró a la banda en el inicio de su show, que comenzó antes de lo previsto, con Chain Of Command, Licensed To Kill, primer representante de su clásico debut, Ample Destruction (1984), y Black, el tema que abría el disco The Fourth Judgement en 1997.
El metal de Jag Panzer conquistaba minuto a minuto a unos espectadores que comenzaron expectantes y que en muy poco tiempo entraron en calor. Tras Iron Eagle, los fans tomaron el protagonismo con cánticos de ‘Oe, oe’ que los músicos agradecieron sobremanera. Los americanos les contestaron con King At A Price, que Conklin calificó como una de sus favoritas. También mencionó que pertenecía a su primer disco conceptual, Thane To The Throne (2000). El siguiente tema era de su segunda obra conceptual; The Halloweed (2023), su último disco de estudio. Se trataba de Onward We Toil, que los fans corearon con ímpetu.
Harry Conklin desplegó su personal estilo sobre el escenario. Desde tocar un violín imaginario hasta cantar realizando un intenso y sorprendente headbanging. Genio y figura sobre las tablas de la Groove liderando una banda muy intensa en la que destacó el guitarrista Ken Rodarte brillando en los extensos solos y buscando siempre la complicidad de las primeras filas. No le fue muy a la zaga el también guitarrista Casey Trask, quien parecía que llevase años en Jag Panzer en lugar de días. La sección rítmica la conformaron el bajista Aric Avina y el batería Jacob Lee Comenan, que realizó una gran interpretación aderezada con numerosos malabares con las baquetas.
The Mission (1943) sonó épica antes de un clásico del heavy metal; Harder Than Steel, que como explicó Conklin formó parte de la banda sonora de la película ‘Dark Places’ (Lugares Oscuros). “Me agradó que la canción se escuchara más que los diálogos”, espetó Harry antes de arrancar con un alarido. Tras concluir el tema el cantante realizó las presentaciones de los músicos. De Casey Trask dijo que tocaba también en dos bandas tributo; una de Kiss en la que hace de Ace Frehley y otra de Van Halen.
La segunda parte de su repertorio arrancó con Symphony Of Terror, Reign Of The Tyrants y Dark Descent. Con una Groove entregada, la recta final del concierto de Jag Panzer se pasó en un santiamén. Cobraron protagonismo canciones como Stronger Than You Know, Take To The Sky y Warfare, coreada por los fans a pleno pulmón. El colofón lo alcanzaron con sus dos últimos temas; Generally Hostile con la audiencia desgañitándose y gritando “No mercy, no mercy” y Shadow Thief, que la han recuperado en esta gira. Heavy metal en estado puro gestado por una gran banda, como Jag Panzer, y un público entregado es lo que se vivió y disfrutó anoche en Groove.
Posiblemente a instancias de Mark Briody, Harry Conklin regaló entre las primeras filas algunos dog tags (chapas de identificación) con el logo de Jag Panzer. Y fueron espléndidos a más no poder a la hora de repartir púas entre los fans. Posiblemente superaron el centenar las que regalaron a sus espectadores.
Jag Panzer había demostrado que su unidad B es más heavy que el acero, tal como reza el tema Harden Than Steel. A cuántos equipos deportivos les gustaría que sus suplentes mantuvieran el nivel o incluso mejoraran los números de los titulares. Pues eso es precisamente lo que consiguieron los componentes de Jag Panzer anoche en Portugalete. Heavy/power en estado puro en una sala que se convirtió nuevamente en un santuario de metal.
Los teloneros fueron los vitorianos Sinner Rage, una joven banda que ya tiene un disco en el mercado, Powerstrike (2025), y cuyo concierto de anoche supuso el debut de uno de sus guitarristas. Agradó ver a músicos tan jóvenes practicando un heavy metal clásico con influencias de ambos lados del Atlántico. Con unas poses muy heavies y canciones interesantes, su repertorio de seis temas estuvo completamente dedicado a esta obra con la que han mostrado su tarjeta de presentación. Con el ímpetu de ayer no tendrán problemas en seguir medrando dentro la escena metálica.
SINNER RAGE