Parkway Drive incendió anoche Can Zam en la despedida de Barcelona Rock Fest 2024. Los australianos realizaron un despliegue pirotécnico de los grandes, que comenzaron con un petardazo ensordecedor al más puro estilo Rammstein. Y así se mantuvieron prácticamente durante toda la actuación de hora y media que cerró la tercera jornada del festival catalán.
Además de los fuegos, las chispas y los efectos que daban la sensación de que el escenario estaba ardiendo, los de Byron Bay ejecutaron su metalcore con amplias miras y con constantes cambios de tensiones musicales. Desde lo más cañero hasta lo más suave, todo tiene cabida en la banda que encabeza el entregado vocalista Winston McCall. En la segunda parte del show hasta contaron con violines y un violonchelo. El frontman apareció por sorpresa entre el público espoleando los ánimos y organizando un circle pit.
La decisión de Barcelona Rock Fest de ubicar a Parkway Drive como cabezas de cartel ha sido una apuesta rupturista en relación con su costumbre de seleccionar nombres plenamente consolidados durante décadas. Aunque los australianos llevan activos la friolera de 21 años, ha sido en los últimos tiempos cuando han desarrollado una escalada meteórica liderando grandes eventos de toda Europa. Es uno de los grupos que tienen un gran poder de convocatoria entre los más jóvenes. Sin embargo, su presencia ayer en Can Zam no era esperada por todos los espectadores, puesto que muchos desfilaron hacia sus casas antes de que salieran a escena.
Power Metal
La jornada de ayer también estuvo marcada por tres grande bandas del power metal que se consolidaron en los noventa. Los primeros en salir fueron Stratovarius, quienes se tuvieron que enfrentar al calor de la primera hora de la tarde mostrándose más entusiastas que en otras actuaciones. Gran oportunidad fue la de ver a Gamma Ray con Kai Hansen liderando una banda que se ha convertido en un segundo plato tras la reunión de Helloween, pero que se niega a dejarla morir. Algún fan llegó a pensar que Ralf Scheepers podría salir al escenario con su antiguo grupo, teniendo en cuenta que había actuado dos días antes en Can Zam con Primal Fear y que acompañó a su exbanda a Japón el pasado mes de mayo. Lamentablemente esa reunión no se produjo en Barcelona.
Además de Stratovarius y Gamma Ray, los fans del power metal disfrutaron del concierto de Blind Guardian, quienes conquistaron con un gran sonido el anochecer de Santa Coloma de Gramenet. La banda se mostró muy sólida y la sorpresa llegó con la aparición de Kai Hansen (Helloween y Gamma Ray) para interpretar Valhalla con Blind Guardian.
A primera hora de la tarde llegó el turno para Abbath y su recuerdo a Immortal. Con las caras pintadas, los noruegos apostaron por el black metal más clásico siempre con el liderazgo de Abbath, quien no paraba de sacudir su cabeza y rechazar el sol. El yin y el yang llegó con la descarga de The Warning. Las tres jóvenes hermanas que forman el trío de Monterrey (México) ofrecieron un gran concierto, que conquistó a muchos nuevos fans. Destacaron tanto por su calidad técnica como por sus voces, que en algunos momentos empastaban con precisión.
En otro giro rotundo de tendencia, Hatebreed llevaron a Can Zam su gira de 30 aniversario y pusieron a la gente a bailar con su explosivo hardcore y con Jamey Jasta como maestro de ceremonias. Hasta sacaron una bola gigante, que denominan ‘Ball Of Death’ en lugar de organizar un wall of death.
Una de las posiciones de privilegio en esta última jornada fue para Soziedad Alkoholika, quienes no defraudaron a sus fans con una actuación intensa a más no poder. En Ratas contaron con un invitado especial, Guillermo Izquierdo de Angelus Apatrida, con quienes evidenciaron su buena relación.
PARKWAY DRIVE
SOZIEDAD ALKOHOLIKA
BLIND GUARDIAN
GAMMA RAY
HATEBREED
THE WARNING
ABBATH
STRATOVARIUS
