RAGE
ÓXIDO
Urban Rock Concept, Vitoria
13 de octubre de 2024
Hay una conocida metáfora que traza una analogía entre la vida y un viaje en tren. A lo largo de ese trayecto cada persona cruza su camino con otras que se van subiendo en cada estación y también pierde el contacto con quienes se van apeando por diferentes circunstancias. El traqueteo del tren de Rage comenzó su camino alrededor de 1984, porque Peavy considera en ese bagaje los años en los que la banda se llamaba Avenger. Desde entonces su maquinaria comenzó a carburar de forma intensa y pronto se convirtieron en una de las locomotoras que impulsó el metal alemán. 40 años después Peavy Wagner, el líder de la banda, continúa su camino de forma irreductible a pesar de todas las estaciones y cambios de vías que ha vivido en este largo recorrido.
En los diferentes apeaderos donde ha descansado Rage se han subido muchos músicos que perduran en el recuerdo de sus incondicionales, desde la contundencia del batería Jörg Michael, los componentes que marcaron el primer trío icónico de la banda alemana; Manni Schmidt (guitarra) y Chris Efthimiadis (batería), hasta los fichajes de excepción que enfilaron el nuevo siglo; Victor Smolski (guitarra) y Mike Terrana (batería). Por el camino muchos otros músicos que han acompañado a Peavy: Jochen Schröder, Thomas Grüning, Rudy Graf, Sven Fischer, Spiros Efthimiadis, André Hilgers, Marcos Rodríguez… La gran mayoría de ellos quedaron en el pasado pero no en el olvido, salvo Manni y Chris, que volvieron a cruzar su camino con Peavy hace diez años para revivir los viejos tiempos gracias al grupo Refuge.
En pleno 2024 Rage han combinado presente y pasado en un año especial. En primer lugar, publicaron un nuevo disco de estudio doble; Afterlifelines, y posteriormente se embarcaron en una gira de 40 aniversario que anoche culminó su recorrido por el sur de Europa en la sala Urban Rock Concept de Vitoria.
Tras la baja del guitarrista Stefan Weber por motivos personales, Rage han vuelto a convertirse en trío con Vassilios «Lucky» Maniatopoulos en la batería y Jean Bormann en la guitarra arropando a Peavy Wagner al bajo y la voz. Anoche arrancaron al son del nuevo tema Cold Desire y de Straight To Hell, un recuerdo al disco Welcome To The Other Side (2001), que en su día marcó un claro cambio de tercio.
Buena parte del mérito de que el show de ayer discurriera rodado la tuvo una entusiasta audiencia que espoleó los ánimos de la banda desde el minuto uno. Peavy y sus compañeros se contagiaron rápidamente y así lo transmitieron en sus caras durante todo el concierto. Como punto negativo, aunque no fuera algo nuevo, hay que mencionar el inferior poder de convocatoria que tiene Rage en Euskadi con respecto a antaño. Aunque hubo un buen ambiente en la Urban Rock Concept, en otras décadas los alemanes actuaban en recintos más grandes.
En una celebración de 40 aniversario y con un caladero de cerca de una treintena de discos, como mencionó Peavy, seguro que cada fan hubiera seleccionado su propio repertorio. Sin embargo, muy pocos hubieran dejado fuera la siguiente terna de canciones; Solitary Man, Black In Mind y Refuge, claros ejemplos de para muchos seguidores la mejor época de la banda. Los cuellos se pusieron a prueba al ritmo de la contundente batería de Lucky y los riffs certeros de Jean Bormann. Y todo perfectamente guiado por un Peavy que sigue marcando el verdadero sello de identidad de Rage.
En un repaso a la carrera de la banda de Herne no se podía quedar fuera su esencia más sinfónica y orquestal. Propusieron dos claros ejemplos con Back In Time y Days Of December, bien recibidos por los fans, que contrastaron con la mayor contundencia de Let Them Rest In Peace y A New Land, canciones recientes de las últimas etapas.
Jean Bormann, que recibió la broma de Peavy por su juventud, se reivindicó claramente, no solo por su forma de tocar, sino también por su intensa y enérgica puesta en escena. Desplegó todo un catálogo de poses, se agitó y hasta tuvo tiempo de interaccionar y bromear con los espectadores de las primeras filas. Peavy, por su parte, agradeció el lujo de una Urban Rock Concept que pone a disposición de los músicos una pequeña nevera en el escenario cargada de cervezas.
Great Old Ones reivindicó el disco Soundchaser antes de otra de las grandes cimas del show de anoche: End Of All Days con una audiencia totalmente volcada. Sorprendió cómo recibieron los fans el nuevo tema; Under A Black Crown, con continuos cantos desde el comienzo. Parecía que se trataba de un clásico más. “¿Cuántos de vosotros escuchabais metal en los años 80?”, preguntó Peavy, y solo unos pocos alzaron sus manos. “¿Qué pasa? ¿Sois todos muy jóvenes o escuchabais disco entonces?”, bromeó el frontman. Fue en la introducción de Don’t Fear The Winter, el gran emblema de la primera época de Rage.
Tras un efímero receso, arremetieron con los bises virando directamente hasta sus comienzos con Prayers Of Steel, la canción que tituló el disco de Avenger en 1985. Fue el anteúltimo asalto previo al himno que todos esperaban y que introdujeron los propios fans cantando Higher Than The Sky. Un tema que alargaron sobremanera completando una actuación que no se quedó lejos de la hora y media, y que fue todo un lujo para los fans que pudieron ver a una banda como Rage literalmente al alcance de la mano.
Y lo mejor de todo es que el viaje de Rage no ha llegado a su fin. Seguirán impulsando esa locomotora del metal alemán que sigue vivo, aunque su popularidad diste mucho de la que tuvo a finales de los noventa y comienzos del nuevo siglo.
ÓXIDO
Los encargados de abrir el concierto de anoche fueron los navarros Óxido. Una banda fundada en Pamplona en 2011 y con tres discos a sus espaldas. Supieron conectar con los fans de Rage a base de un heavy metal contundente con grandes riffs, notables melodías dobladas y la cercanía del vocalista Íñigo de Miguel.
Desde la agresividad de Bandeja de Plata hasta la intensidad emotiva de Gris, Óxido dejaron una buena carta de presentación entre los fans de Rage. El vocalista bromeó y pidió a los espectadores que se quedaran a ver a los cabezas de cartel por educación. Finiquitaron su interesante show con Eléctricos y Oxidados completando una actuación en la que interpretaron once canciones.
RAGE
ÓXIDO