Buena dosis de NWOBHM se avecinaba en el escenario ‘Mark Reale’ con las actuaciones consecutivas de Tank y Praying Mantis. Una gran oportunidad para los nostálgicos de un movimiento que revolucionó el heavy metal primero en Reino Unido y después en toda Europa a comienzos de los años ochenta.
Tank es uno de los cada vez más habituales casos en los que dos formaciones se disputan un mismo nombre. Los Tank que llegaron hasta Villena eran los encabezados por los guitarristas Mick Tucker y Cliff Evans. Aunque ninguno de ellos estuvo presente en los dos primeros discos de la banda, han conseguido estabilizar una carrera editando álbumes y actuando en directo. Por otro lado está la formación del fundador Algy Ward, aunque su trayectoria parece más difusa.
El nuevo cantante de Tank es el reputado David Readman de Pink Cream 69, que sucede en el puesto a vocalistas conocidos como Doogie White (Rainbow, Michael Schenker’s Temple Of Rock) o ZP Theart (Dragonforce, Skid Row). En Villena arrancaron con el clásico This Means War y con Judgement Day, el tema que abría primer disco de esta versión de Tank; War Machine.
Concentraron buena parte de su actuación en el escenario ‘Mark Reale’ en los temas conocidos de los años ochenta, como Echoes Of A Distant Battle y Honour And Blood, aunque también dispusieron de tiempo para presentar la canción más reciente Make A Little Time. Destacaba la contundencia de las guitarras de Tucker y Evans y la clase de un David Readman que acopló su vena hard rock al heavy metal más potente que caracteriza a Tank.
Remataron sus cincuenta minutos con Power Of The Hunter, el tema título del segundo disco de Tank y con (He Fell In Love With A) Stormtrooper, que también cerraba el debut de la banda británica; Filthy Hounds Of Hades. Una época en la que se les consideraba como una sombra de Motörhead.
