Los finlandeses Amorphis llegaban hasta uno de los escenarios principales de Leyendas Del Rock una semana después de actuar en Wacken Open Air y dispuestos a poner fin a su temporada de festivales veraniegos. Un punto y seguido para una banda que tiene que continuar presentando en directo su flamante lanzamiento, Queen Of Time (mayo de 2018, Nuclear Blast). Tras una escala en Finlandia les espera una gira por Norteamérica durante el mes de septiembre.
Salieron a escena minutos después de la controvertida actuación de W.A.S.P. muy confiados en su nuevo disco, que desmenuzaron de entrada con temas como The Bee o The Golden Elk. Los de Helsinki ofrecieron una clara apuesta de presente en tierras alicantinas que completaron con canciones de su anterior trabajo, como Sacrifice o Bad Blood, que enlazaron con Silver Bride.
El protagonismo del directo de Amorphis recae en un Tomi Joutsen que se agita histriónico transmitiendo todos los matices de la banda finlandesa. En muchas ocasiones su pelo arremolinado impedía ver su cara. Tras el tema nuevo, Wrong Direction, llegó uno de los pocos recuerdos para el material de los años noventa; Against Widows del Elegy que aumentó las revoluciones del concierto.
Pero a los viejos fans todavía les quedaban más alegrías. The Castaway recuperó aquel death metal melódico y melancólico que irrumpió en la escena europea en la primera mitad de la década de los noventa. En la recta final también recuperaron temas de su última época, como Daughter Of Hate y Death Of A King, antes de ofrecer uno de sus mayores clásicos; House Of Sleep, con una afición entregada coreando el estribillo. Todavía quedaba una canción; el gran single del Tales From The Thousand Lakes; Black Winter Day, que completó una actuación que dejó más que satisfechos a los fans de Amorphis.
